viernes, 6 de abril de 2012

Siesta

Hoy Mandolino ha dormido conmigo la siesta, cual peluche de vida manifiesta, almohadita blanda persa, de ternura hecha. En forma de ovillo, ¡qué tierno, Mandolino!
Ululan ritmos y música las sibilas cantarinas, noche sin luna, noche tranquila. Canto de sirenas varadas en mi barco. De escarcha restallando rocío en la ventana, junto al estante la copa de gincana; desde dentro de una concha tostada sale un cangrejo y me manda un beso… Lo reenvío hacia el farol y se ilumina la habitación, de estrellas dignas de su color, burbujas de brujas púrpuras, los cómics cobran vida en la buhardilla, bellas damas heroínas dejando una estela turquesa de purpurina, cuelgan lianas con capullos luminiscentes y dos goblins andan cazando más lejos, tras el gigante conejo, allá donde varias elfas juegan a soñar que están despiertas… El cactus esponja, la planta ámbar, haciendo yoga las tres damas de plata, senos turgentes, pezones de brillo escarlata…

domingo, 1 de abril de 2012

Sesión de jazz

Sesión de jazz en la buhardilla en mitad de la noche, acústicas suenan las piedras del bosque, una mezcla de camello y canguro de precioso azul oscuro, porta ánforas a los goblins junto al ciprés maduro. Roncan, se diría, todos los seres sus epopeyas en mi buhardilla. Y unos ratoncillos vestidos con frac bailan claqué en las estanterías, estrenando la comedia de duendes payasos dándose tortazos, en la feria de la imaginación. De las camisetas mojadas de las hadas, de las medias de las elfas, de las rosas holográficas añil, pétalos de flor de lis, magas con licor de menta, alfombrado el suelo de tiernas adelfas. Tríbadas en tribu salen por las florestas, maquillaje en los pómulos, trasponen antenas la luna llena, brebaje en los glóbulos, y a lo lejos amarillea…
Un violín lagrimea varias notas rosa fosforescente sobre el farol y su temple, una uña de dragón y se enciende la vela complaciente, estrellado el cielo completamente de ninfeas fucsia, vuelan semidesnudas tres lumias, sombra lunar en los ojos, los duendes corretean por entre la colcha de mis antojos…
Y la mosca tse-tse merodea por mi conciencia, mientras leo cómics y diseño viñetas.